Nota: Clarín
20 Oct 2019
Natalia Muscatelli nmuscatelli@clarin.com
Las constantes remarcaciones de precios y la incertidumbre económica después del resultado de las Paso están incentivando una mayor dispersión de precios en las góndolas. Según distintos relevamientos privados, esas diferencias entre lo que cuesta un mismo producto de la misma marca, puede llegar al 100%, según donde se lo compre.
En la pagina oficial de Precios Claros, de la Secretaría de Comercio, las diferencias son menores: oscilan entre el 7 y el 27%, tomando una muestra de 10 artículos indispensables de la canasta familiar. Por ejemplo, una leche entera en sachet puede costar $44,90 en un comercio y $54 a pocas cuadras. Y un paquete de harina puede costar entre $57 a $69.
Sin embargo, las diferencias pueden ser mucho más amplias, según otros sondeos. Desde Scanntech, por caso, Gustavo Mallo detectó que, en septiembre, entre los 60 productos más vendidos en 170 autoservicios de CABA y los suburbios, el promedio de la dispersión superó el 100%. En ese rango, el puré de tomates, por ejemplo, osciló entre $21,85 y $50 y el yogur con cereales, entre $47,83 y $83,9.
Básicamente, la dispersión de precios se ve cuando hay una inflación sostenidamente alta y se pierden los precios de referencia de la economía”, explica el economista Juan Ignacio Paolicchi, de la consultora Eco Go.
También se suma “la falta de controles y la variación permanente en la estructura de costos”, señala Héctor Polino, titular de la asociación Consumidores Libres. “Nadie sabe cuál es el precio de los productos: ni el comerciante a cuánto lo va a reponer en su negocio ni el fabricante, a cuánto va a pagar la materia prima”, explica.
Osvaldo del Rio, director de la consultora Scentia, comenta que, antes de la medida oficial de bajar el IVA a los alimentos, “en un canasto amplio (esto es, más de 2.000 productos comparables entre supermercados y autoservicios) los autoservicios independientes eran 19% más caros en Capital Federal y Gran Buenos Aires, respecto del promedio. Y 17% mas caros en el interior del país. Según sus relevamientos, además, la reducción del IVA impactó en una baja del 4,5% promedio en los supermercados. Sin embargo, en los autoservicios, las mismas categorías registraron un aumento promedio del 7,6%, en septiembre.
Según los relevamientos de la consultora Focus Market, en las primeras semanas del mes, los precios se aceleraron y también se incrementó la brecha de precios, que llega hasta el 40%. “En las últimas dos semanas, mucha gente se stockeó yendo a los mayoristas e hipermercados por temor a los mayores aumentos. Esto produjo, a su vez, que las cadenas salieran con fuertes promociones, ofertas y descuentos para incentivar las ventas. Y es ahí donde se amplió la gran dispersión en los precios”, agregó. ?
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