Nota: Hoy
29/12/16
A la inflación y la especulación de los empresarios se suma la inacción del Gobierno nacional en el control de la cadena de formación de importes, para generar un cóctel de aumentos desmedidos e indiscriminados. Qué dicen los especialistas
Parafraseando al exministro de Economía Álvaro Alsogaray, los argentinos pueden decir este diciembre: “Hay que pasar el verano”. Es que la temporada estival no solamente los encontrará pagando el remanente de cuotas que el tarifazo de julio dejó: a la inflación que desde hace años azota el país y que el Gobierno de Mauricio Macri no logró domar, hay que sumarle un aumento exorbitante en los precios de los artículos propios de esta estación, desde repelentes hasta carpas para la playa.
Con un índice inflacionario que ronda el 40 por ciento anual, los insecticidas aumentaron un 60 por ciento respecto al año pasado, los protectores solares hasta un 100 por ciento y los repelentes un 83 por ciento. Las sombrillas y sillas de camping, 76 por ciento, y los juguetes playeros, un 55. En la costa, el estacionamiento se incrementó en un 58 por ciento y los precios en los restaurantes, un 56.
El Centro de Economía Política Argentina estima que el presupuesto de esta temporada para que una familia tipo (dos adultos y dos menores) veranee quince días en Mar del Plata aumentó entre un 47 y un 50 por ciento.
¿Por qué los incrementos son tan desproporcionados? ¿Mera especulación empresarial? ¿Inflación descontrolada? ¿Cuáles son las causas de que ya no existan precios de referencia?
Héctor Polino, presidente de Consumidores Libres, describió a este medio que, además del aumento de la demanda propio de la temporada, “vivimos un proceso inflacionario muy importante. No hay ningún tipo de control por parte del Gobierno y, en consecuencia, las estructuras de costos van por un rubro que se denomina por las dudas. Es decir, los comerciantes remarcan permanentemente, pese a que cada vez se vende menos, porque nadie controla nada”.
En el mismo sentido, Claudio Boada, titular de la Unión de Usuarios y Consumidores, expresó en diálogo con diario Hoy: “Pensar que la formación de un importe consiste en los costos más una ganancia razonable es una fantasía. El precio es pura especulación. Por eso influyen factores como las expectativas económicas, qué va a pasar con la inflación, cómo se comportará el dólar, si va a seguir habiendo clientela o no”.
Cada cual atiende su juego
Desde la Asociación de Defensa de Usuarios y Consumidores Unidos (Adecua), Osvaldo Riopedre destacó el factor especulación como un condicionante siempre presente en la suba de precios. “Por supuesto hay también un aprovechamiento”, dijo a este medio. “Siempre el comerciante guarda la mercadería y la saca a la venta cuando la gente la necesita, pero ahí tiene que controlar el Estado para saber cuáles son las cadenas de comercialización que tiene el producto”, agregó.
Boada responsabilizó directamente al Gobierno nacional por la disparidad en las subas: “La visión del macrismo es que el Estado se abstenga de toda participación y deje libre al mercado para que haga lo que le parezca, por lo que en este momento nosotros no tenemos ninguna participación estatal en la regulación y formación de precios”, sostuvo.
Polino coincidió con esta visión y opinó que, para paliar el aumento indiscriminado de precios, la gestión de Macri debería “aplicar la Ley de Defensa del Consumidor, la Ley de Lealtad Comercial, poner en funcionamiento de una buena vez el denominado observatorio de precios y hacer cumplir la política de precios cuidados, que hoy están bastante descuidados”.
Tres de cada diez personas solo compran ofertas para Navidad
Una encuesta realizada entre 30.000 personas detectó que el 34% de los consumidores analiza cada vez más qué marcas tienen ofertas para luego efectuar la compra navideña, y el 23% decide en función de lo que ve en promoción.
Para aprovechar al máximo las rebajas que las firmas y los lugares de compras suelen ofrecer para las fiestas, el 65,9% de las personas dijo organizarse, por ejemplo, con varias visitas a los comercios en los días de la semana que ofrecen ofertas con tarjetas de crédito y débito.
El relevamiento fue realizado por IRSA Propiedades Comerciales, que posee algunos de los principales shoppings del país, entre los que se encuentran Patio Bullrich, DOT Baires Shopping, Alto Palermo, Abasto y Alto Avellaneda.
El 45,8 por ciento de los encuestados señaló que en sus familias deciden obsequiarse entre todos un regalo y el 32 por ciento dijo comprar presentes solo para el círculo íntimo compuesto por madres, padres e hijos.
CUÁNTO CUESTA EL CALOR:
Insecticidas 60%
Juguetes de playa 55%
Protectores solares 100%
Repelentes 83%
Sombrillas y sillas de camping 76%
Veraneo de familia tipo por 15 días50%
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